En cuanto programa de radio o televisión hemos escuchado al Ministro Rene Cortazar explicando las sensibles mejorías que ha tenido el servicio que proporciona a la ciudadanía el Transantiago, aunque advirtiendo que todavía no alcanza los estándares deseables.La verdad es que el sistema sigue siendo extraordinariamente malo, los santiaguinos tienen que salir varias horas antes para no llegar tarde a la pega, las apreturas inhumanas y las largas esperas siguen exactamente igual. La falta de respeto a la ciudadanía de mantiene como al principio.
Pareciera que nuestras autoridades, desde la Presidente para abajo, por el solo hecho de asumir sus cargos dejan de tener una visión clara de lo que sucede en el país y que la enorme cantidad de asesores y técnicos que les rodean no les dejan ver las realidades que sufre el pueblo.
Transantiago, salud, falta de seguridad, educación deficiente, falta de trabajo, remuneraciones bajas, escasez de expectativas, viviendas indignas, futuro incierto, tienen a la población extremadamente estresada y hacen presagiar un lamentable estallido social.
La injusticia, institucionalizada por la concertación, ha montado una verdadera bomba de tiempo, pues los pueblos no pueden aceptar vivir en un país al que a cada rato se pondera su riqueza, mientras su pueblo vive en condiciones francamente miserables.
Creemos que las autoridades, en especial la Gobernante, deben bajar al pueblo llano, claro que sin las manadas de guardaespaldas que les acompañan, sin impedir que el pueblo pueda manifestar sus inquietudes y ciertamente sin invitados “seleccionados” para evitar escuchar la verdad.
Estamos ciertos, que de hacer actividades como las descritas, nuestros gobernantes y autoridades se llevarían sorpresas inmensas, entre otras por las condiciones de vida populares y la sería situación de desencanto, más bien de molestia, que se está viviendo en el país.
Bajen del Olimpo Señorita y Señores, nuestro pueblo no merece los intentos de engaño permanentes a que están sometidos, la ceguera de las autoridades ni la forma de vida a la que están sometiendo a los más humildes de nuestra sociedad, ni la destrucción de las clases medias.
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El senador Alejandro Navarro debe ser destituido, para ellos hay varias causales que debieran conducir a su desafuero. Como asunto primero, está su permanente intervención en la política exterior chilena y su clara dependencia de un Gobierno externo, el de Hugo Chávez de Venezuela.
Las actividades matonezcas en la marcha de la CUT, para luego hacerse la victima, transgrediendo leyes especificas al respecto, demuestran que el sujeto no está capacitado intelectual, síquica ni moralmente para ejercer el cargo. Porque creemos que en Chile no hay privilegiados, debe ser sancionado.
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El conflicto de la Salud parece caminar directamente a una fuerte colisión entre un incapaz ministerio y los gremios médicos. Ayer quedaron cortadas las negociaciones entre ambas entidades. Preparándose a renuncias masivas de los galenos y un paro nacional para fines de mes.
El conflicto se produce por un discurso oficial que dice que todo marcha bien, lo que a las claras es falso, malas condiciones laborales, falta de infraestructura y de elementos básicos, condiciones sanitarias deficientes, jornadas laborales interminables y escasez de fármacos.
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Nuestro Gobierno sigue dando señales de no entender nada de nada, ahora solo pretende impedir que las manifestaciones de extremistas pasen por la Alameda o La Moneda. Si comprendieran las cosas, simplemente se aplicaría durísimas sanciones a los terroristas o a aquellos que amaguen la tranquilidad pública.
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